El Avispón 22D está equipado con autocarabinas duales de calibre 30, lo que le permite atacar rápidamente amenazas aéreas y terrestres. Esta ágil unidad de tierra sobresale en el hostigamiento con su capacidad para moverse rápidamente por los campos de batalla, lanzando ataques rápidos y específicos. Asegura una presión sostenida sobre los adversarios antes de que puedan consolidar sus fuerzas.

El desarrollo del Avispón 22D fue catalizado por las necesidades del Sistema de Corona Central en las lunas de Júpiter, donde diversos terrenos exigían una unidad lo suficientemente versátil como para navegar por peñascos rocosos y campos de hielo de manera efectiva. La capacidad del Avispón para operar en estos variados paisajes lo convirtió en una herramienta esencial en las escaramuzas, lo que permitió a los ases mantener la superioridad táctica en movimiento. Su despliegue refleja una respuesta estratégica a las demandas únicas de la guerra moderna, más centrada en la velocidad y la adaptabilidad como claves para controlar las escaramuzas tempranas. Ojalá pudiera volar.